En la industria existe un amplio abanico de técnicas para la creación de piezas y componentes complejos. Una de estas técnicas es la creación de moldes de cera, que hunde sus raíces en la antigüedad. Aunque resulte difícil de creer, indios, sumerios, chinos e incas, de forma independiente y paralela, ya utilizaban la cera de abejas para fabricar moldes que luego rellenaban con materiales de larga duración y resistencia, como el oro y otros metales.

La técnica actual consiste en crear un molde de cera y cubrirlo con un material más resistente, como la cerámica, para luego derretir la cera y obtener un molde apto para soportar el calor del metal fundido.

Tipos de ceras de fundición

Hay muchas ceras que pueden utilizarse para este fin. En la actualidad suelen utilizarse mezclas compuestas por ceras naturales y sintéticas, que dan como resultado un material sumamente maleable que permite crear moldes de gran precisión y excelente acabado.

La elección de la cera adecuada va a depender de las propiedades de flujo, la necesidad del reciclado de la cera o no, los requerimientos de aplicación y el acabado de la superficie buscado, entre otros factores. Entre nuestros productos presentamos dos tipos de cera para fundición:

Filled pattern wax

Este tipo de ceras contienen elementos de relleno que proveen propiedades específicas a la cera que aseguran su fuerza, estabilidad, baja expansión frente a las altas temperaturas y mínimo encogimiento. Por otra parte, este tipo de ceras pueden ser más difíciles de recuperar del molde.

Non-filled pattern wax

Por otra parte, existe un tipo de cera que no contiene materiales de relleno y ofrece una buena respuesta mecánica y térmica. Son las preferidas generalmente cuando se busca crear moldes con formas o patrones complejos. Tienen un excelente flujo y proveen a las superficies de un formidable acabado. Por último, son perfectamente recuperables y reciclables.